Llevo meses escuchando historias acerca de «El perro del hortelano», ese que aunque no come vegetales, cuida el huerto de su amo y no deja que nadie se acerque, por lo que «ni come, ni deja comer».
Parece que es un mal común que puede tener su origen en que hombres y mujeres pensamos y hablamos idiomas distintos. Somos incapaces de sincerarnos y solo sabemos malinterpretar señales y dejar que nuestro ego y nuestra ilusión batallen contra nuestro sentido común y con lo social y racionalmente establecido.
Ha llegado el momento de rebelarse y he decidido en nombre de todas esas personas que sufren o han sufrido a alguno de estos «simpáticos» canes, escribir este manifiesto.
Esto es todo lo que NO QUIERO:
No quiero que le des like a mis fotos si no estás dispuesto a comentarlas
No quiero que me preguntes mis planes, si no tienes intención de unirte a ellos
No quiero que aparezcas cuando menos lo espero y a los 10 minutos te vayas
No quiero estar pendiente de ti y que tú no me preguntes nunca: ¿Cómo estás?
No quiero que sigas pensando que soy fuerte cuando eres tú la razón de mi vulnerabilidad
No quiero que los demás piensen que me quieres y que tú aún no me lo hayas dicho
No quiero que se te olvide que NO soy tu AMIGO
No quiero que me digas que te gusta mi ropa si no estás dispuesto a quitármela
No quiero dejar de mandarte un wassap para que no pienses que siempre estoy pensando en ti
No quiero estar siempre pensando en ti
No quiero que me pregunten si somos pareja, porque se me queda cara de poker y no se cómo contestar
No quiero que todo me recuerde a ti
No quiero que me salga esa sonrisa tonta cuando miro el móvil y tengo un mensaje tuyo
No quiero perder la noción del tiempo cuando estoy contigo
No quiero que se me note tanto
No quiero perderte
No quiero pensar qué pasará mañana
Pero por encima de todas las cosas, no quiero dejar de sentir lo que siento, aunque no me lleve a ningún lado.
Reyes
Fuente de la imagen: Pinterest