Día 6 de enero. Día de Reyes. Día de sorpresas, nervios, regalos… ¿Os suena? Si hay un día que sigue siendo pura magia es el 6 de enero. Y si hay alguien que realmente se lo pasa en grande todos los 6 de enero de cada año son…los niños. Son los auténticos protagonistas. Madrugan como nunca aunque muchos ya están en ese momento en el que piensan que los Reyes Magos son sólo una leyenda. Pero para mí, pase lo que pase, ellos siempre estarán. Como cuando era niña.
Sus Majestades, y toda la legión de pajes que les acompañan, tienen la última tecnología para repartir los regalos en una sola noche aunque, también hay que decirlo, existen “juguetes” que ni los mismísmos Reyes encuentran porque somos muchos y algunos con gustos bastante raritos. Por esa razón este año en mi carta a SS.MM. los Magos de Oriente simplemente hice una lista de todas las cosas que necesito…y creo merecer. Lejos de pedir imposibles, como este año al parecer nos hemos portado muy mal, les pedí poco: pequeñas buenas cosas que recordar que aunque no sean nada, al final, son todo. Muchas risas, poder viajar, encuentros interesantes, volver a la normalidad y alguien (o algo) que nos saque de este lío tan gordo en el que nos hemos metido. ¡Ah, y lo de siempre! Salud, dinero y, por supuesto, mucho amor. ¡Y aquí más vale pasarse que quedarse corto! También, si les queda algún hueco en sus carrozas o en las alforjas de los camellos, que vengan buenos libros y buenas películas. Al fin y al cabo, nos acabamos convirtiendo en la historia que nos contamos a nosotros mismos. La verdad es que este año con muy poco, seré muy feliz. Confío en ellos. Nunca me han fallado.
Día 6 de enero. Día de Reyes y día de pijama, chocolate y roscón. Y, sobre todo, día de buena compañía, juegos y alguna peli navideña (quizá la última de estas fiestas) con manta y en el sofá al calor de… ¿os suena también? Hablo de ese calor que sólo sientes cuando estás con los tuyos, aprovechando todo el tiempo del mundo con las personas a las que quieres porque al final del día tocará…quitar el árbol de la Navidad más rara de nuestras vidas.
Majestades: En la vida esperas cosas que no ocurren y ocurren cosas que no esperas. Así que este año, más que nunca, cuidaos…y cuidad.
Coco.
Fuente de la fotografía: Pinterest.