Un día ganas otro pierdes y así es la vida. Y lo mejor que puedes hacer por tu salud, sobre todo mental, es aceptarlo cuanto antes. Enseñar a perder, o gestionar la frustración. No hablo del deporte, hablo en este caso del trabajo.
Hay clientes que van, otros que vienen pero de esto va la ley de la oferta y la demanda, principio básico sobre el que se basa una economía de mercado.
Este año ha habido clientes que se han ido, cada uno por con sus razones, pero han sido siempre muchos más los que han llegado.
No entiendo como gente que dice que son superprofesionales cuando les quitas un cliente, pegan pataletas como niños pequeños, o actúan como matones de patio de instituto. Tengo una mala costumbre últimamente y es todo por escrito, trazamos un plan y me dices quien es el que toma las decisiones, ya que tengo que hablar con él o con ella.
Sinceramente estos personajllos siempre me han gustado, le ponen un poco de sal a mi día a día, y lo que me rio con ellos. Que si la culpa es mía, que si yo he hecho. Cinco cosas que debes hacer sino quieres ser uno de estos personajillos:
1. No escurras el bulto y asume tu culpa si la tienes.
- Ofrece soluciones, cada vez que hay un problema que enfada a un cliente, se crea una oportunidad para mejorar en aquello que ha ido mal.
- Las personas se enfadan porque les mueve la impaciencia. Pon fechas, habla, comunícate, progresa y da sensación de progresar.
- Disponible. Cuando alguien se enfada necesita de alguien que le entienda, si no vas a coger el teléfono, ni devolver llamadas eso les va a enfadar mucho más, proporciona siempre una forma de contacto, fácil, accesible y rápida.
- Ve al grano y comunica, adapta tu mensaje a quien lo va a recibir.
No soy de dar consejos y mucho menos a ti personajillo, pero si a la hora de tratar con personas fueses un poco, o en tu caso un mucho más profesional igual ni nos hubiésemos conocido.
A todo esto Feliz año Nuevo Personajillo.
Caye