«El agua moja, el cielo es azul y las mujeres tienen secretos. ¿A quién le importa?» Dice el personaje que interpreta Bruce Willis en «El último boy scout».
Pero no somos solo las mujeres, todos tenemos secretos, afortunadamente, pues hay cosas de los que nos rodean que es mejor que no sepamos.
Dicen que la información es poder, por lo tanto, los secretos también lo son. Tener secretos o guardarlos nos hace sentir importantes. Sabemos cosas que los demás ignoran y tenemos la capacidad de decidir si lo compartimos o no. Sin duda, el poder es nuestro y los secretos también.
Hay quien lleva muy mal no saber todo de otros y cuando llegan a rozar la desesperación, inventan. De este modo se crean secretos que no lo son y de las mentiras sacan verdades, pero no son tácticas que me interesen, la verdad.
A mi los secretos de los demás no me importan lo más mínimo. Allá ellos con sus cosas, sus hechos y sus conciencias. Si no cuentan su vida y sus experiencias, por algo será. Yo prefiero esperar, pues lo que hoy no sabes pagando, mañana lo sabes gratis, y al final me acabaré enterando de eso que intentan ocultar.
Eso si, todos somos el secreto de alguien y ese secreto es mejor no desvelarlo. Los secretos de alcoba es mejor que queden así, en la alcoba. Que nadie sepa lo que pasa entre dos personas, pues tal vez no sabrían entenderlo.
¿Me guardas el secreto?
Reyes