¿Te has parado a pensar en lo importantes que son las ventanas?
Pues lo son, y mucho, y no me refiero solo a las ventanas propiamente dichas, sino a todas esas que nos ayudan a ver más allá.
Una situación en la que valoramos muchísimo las ventanas es a la hora de elegir un hogar. Nos importa que todas las habitaciones tengan ventana, que tengan buena orientación, y las mejores vistas posibles, porque el tiempo que pasamos en casa queremos tener luz exterior y que al mirar por la ventana, el mar o los árboles pasen a formar parte de nuestro paisaje cercano. Claro que a veces lo que tienes enfrente es un edificio de viviendas con un vecino cotilla, o tal vez el voyeur eres tú…
También nos importan las ventanas en el lugar de trabajo. Cuando quitas la vista del ordenador, del cliente, del jefe o de lo que tengas delante, es fantástico tener unas vistas relajantes, que te hagan pensar en lo que vas a hacer cuando acabes de trabajar, o disfrutar del buen día aunque te queden unas horas de curro. Y si no me crees, pregúntale a un trabajador de la empresa del triángulo verde qué es lo que más echa de menos en el edificio en el que trabaja. Es fundamental tener una ventana y saber si fuera llueve o hace sol, si es de día o de noche, y así no perder la conciencia del tiempo y el espacio.
Hay otras ventanas, que se encuentran en nuestra pantalla, como ésta en la que me estás leyendo, y que también sirven para ver más allá. Cuando la rutina te puede, el trabajo te acecha o la monotonía te asedia, hay ventanas como ésta que te sirven de vía de escape. Ya sea en el ordenador, o en el móvil, puedes abrir ventanas que te transporten lejos. Puedes visitar lugares lejanos o hablar con personas que están lejos físicamente y te hacen sentir lo mismo que al mirar por la ventana de tu casa y ver el mar. Sonríes sin darte cuenta.
Lo malo es que en muchas ocasiones hay obstáculos que nos impiden mirar por la ventana. Las persianas, las cortinas, o las personas que se nos ponen en medio y no nos dejan mirar más allá.
A partir de hoy, yo voy a dedicarme a abrir todas las ventanas que pueda, persianas y cortinas incluídas.
Quiero sentir el sol, respirar aire fresco y sonreír sin darme cuenta.
¿Me ayudas?
Reyes
Fuente de la foto: Pinterest
cu- cú! 😉