¿Y tú de qué vas?

¿Y tú de qué vas?

Pues eso me preguntó a mí hace poco una un amigo que no habla muy bien el español.

La verdad que me tiré toda una noche haciendo el pesado preguntándole a todo el que me encontraba ¿Y tú de qué vas?

No sé si por la repetición o por los gintonics pero el caso es que la preguntita se ha quedado en mi cabeza. Es una de esas preguntas que cuando te la contestas sin filtros te obliga a desnudarte,  a quedarte en bolas y mostrar quien eres. Yo, no es por el tema de voyerismo pero, he visto a muchos de mis amigos y amigas desnudarse delante de mí y yo también me he desnudado delante de ellos. Son esos momentos en los que de verdad conoces a una persona.

Todos tenemos cosas buenas o cosas malas, o como a mí me gusta decir tenemos cosas y el malo y el bueno lo pone el de enfrente. También la experiencia te hace manejar situaciones, situaciones tristes, situaciones de alegría, situaciones que son una putada, situaciones en las que quieres desaparecer, situaciones en las que quieres ser el centro del universo, situaciones en las que te enamoran y un sinfín más de todas las formas y colores. Esos momentos en los que has puesto el freno para controlar, para equilibrar, para no cagarla, para escuchar y analizar. Sí, todos sabemos que son los momentos del arrepentimiento, los que luego muchas veces hay personas que se tiran toda una vida contando la historia de que si él hubiese decidido hacer tal cosa ahora él hubiese inventado twitter. O como me conto una vez una amiga, que si hubiese seguido con su novio del instituto se habría dedicado al porno. Historias sorprendes, todas, que nos llevan más allá del arrepentimiento al conformismo.

A el conformismo en contar una bonita historia de lo que podríamos haber sido protagonistas si hubiésemos echado más huevos en la mayoría de los casos.

La inseguridad en estos casos siempre juega un papel muy importante en el momento de cagarla y quedarnos en una muy buena promesa.

Si tienes que hacer algo, o tomar una decisión haz lo que tengas que hacer, lo único que te pido es que no vengas luego contándome historias de lo que podrías haber sido si hubieses hecho lo contrario. Y que un día casi lo consigues pero en el último momento te entro el canguelo.

Si eres de estos, seguro que no sabes contestarme una pregunta ¿Y tú de qué vas?

¿Si quieres saber de qué voy yo? La próxima vez que nos veamos me lo preguntas, igual hasta acabamos desnudos.

Caye

Fuente de la foto Pinterest

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1 COMENTARIO

  1. Algún día me he medio desnudado para ti y se que te he desconcertado. La próxima vez, preguntame de que voy, pero t aseguro q nadie en el universo tiene la respuesta. No porq sea especial, sino porq se trata de un conocimiento fuera del alcance humano. D q vas??

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