Cincuenta años no son nada.

Cincuenta años no son nada… fácil.

Cincuenta años de matrimonio son los que ayer celebraron mis padres, sus bodas de oro, y estoy convencida de que a pesar del brillo, no ha sido tarea fácil, por lo que tiene aún mucho más mérito de lo que pudiera parecer.

6 de enero de 1969. Rosario, aún menor de edad (por aquella época la mayoría de edad llegaba a los 21 aunque se trabajara desde los 14), con la autorización de su padre, contraía matrimonio con Agustín, recientemente huérfano de padre y madre. Empezaba así un matrimonio que en el día de su octavo aniversario tuvo como regalo de reyes a su única hija, ¿casualidades de la vida o magia de los Reyes Magos?.

Hoy, cincuenta años después pueden contar que han vivido toda una vida juntos, o dos, o tres… han madurado juntos, han aprendido juntos, han sufrido juntos y también han disfrutado juntos.

Viéndolos ayer, rodeados de los nuestros, sentí que estaba ante un claro ejemplo a seguir. Ellos han sido fuertes, han sabido quererse, respetarse y comprenderse, con sus virtudes y defectos durante más de 50 años. Son cómplices y compañeros de vida que siempre han formado un muy buen equipo.

El día de Reyes siempre ha sido NUESTRO, de los tres. Su aniversario y mi cumpleaños, pero ayer por primera vez no soplé vela y mereció la pena! Los protagonistas absolutos eran ellos. Ayer tocaba revivir su boda, la novia con sus flores, el novio vestido de traje y corbata y su nieto jaleando ¡Que se besen, que se besen! y los demás: ¡Vivan los novios!.

Entre todos ayer quisimos que su día fuera memorable, que lo recuerden siempre como uno de los más bonitos y que sepan que les queremos.

Cincuenta años no son nada, o mejor dicho, cincuenta años lo son todo.

Reyes

Imagen: el ramo de la novia a las puertas del lugar de los hechos, la Concatedral de San Nicolas, Alicante, 50 años después.

 

spot_imgspot_img

Suscríbete

Seguro que te gusta

La puerta abierta.

Ha caído en mis manos un interesantísimo libro que...

Cogito EGO sum

No, no has leído mal, pone EGO, así bien...

Mis Jedi

La vida está llena de decisiones difíciles: elegir entre...

23 LECCIONES DEL 23

Decir que no a lo que no. Y ser...

Blue… tururú!

No paro de recibir mails que me dicen que...
Artículo anteriorLos míos
Artículo siguiente¡A las barricadas!

1 COMENTARIO

Responder a Sara Moros Cancelar respuesta

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Share This